Me ha impresionado como enfoca el ámbito de la psiquiatría versus o complemento de la fortaleza de Dios. Son ideas que siempre, a nivel personal que creído, pero escucharlas me hace confirmar la fuerza sanadora de Dios.
Comenta que hay personas que cuando se encuentran ya muy debilitadas o enfermas, solo en esos casos, es necesario acudir a los psiquiatras pero siempre como complemento de lo espiritual. Lo espiritual actúa sobre el daño psicológico de la causa que provoca la depresión.
Asimismo comenta que hay grupos dentro de la iglesia en los que se alaba a Dios, se cantan salmos, se lee la palabra de Dios. "Estos grupos tienen algo que jamás podrá dar un psiquiatra: la Gracia, Gracia que es una moción interna que transforma desde dentro. Este elemento de la vida espiritual, puede arrastrar a la persona no sólo a la normalidad sino a la alegría, a la felicidad".
A nivel personal, puedo testificar de cuántas veces me he sentido abatida, debilitada, sin fuerzas y con una tristeza inexorable y al acudir a mi grupo de oración y comunión con mis hermanos ya se me ha olvidado todo, todo ha quedado curado.
El aliento de Dios todo lo puede.
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